Que el corazón te palpite a cien por hora. Recuerda que llorar no suprime dolores. Que sueñes pero que no se te olvide volar. Súbete a lo más alto y que si tienes que bajar, baja. Disfruta, pero camina y no te detengas en el camino. Si tropiezas, te levantas, aunque sepas que volverás a tropezarte. Nunca dudes y sobre todo que no se te olvide, que aunque soñar sea gratis, hace falta principalmente una cosa, para soñar primero hay que sonreír. Y sin esto, no puedes cumplir nada de lo anterior y sin sueños la entrada está PROHIBIDA aquí...



miércoles, 23 de marzo de 2011

Hoy y siempre tuya



"Querido, solo venía a decirte unas últimas palabras:
Tu y yo fuimos todo, absolutamente todo. Me he dado cuenta demasiado tarde de que esto es un todo o nada, un ahora o nunca. Pero sabes, elegiste bien, el para nada no está tan mal. Los nunca’s me encantan, se me da demasiado bien sobrevivir con ellos. He oído decir que llorar es bueno, pero a mi no me gustan, considero que lo hago demasiado, y más por quién ni siquiera se merece una lágrima (pero ni una). Sabes que soy algo inocente, que me gusta sonreír aunque las cosas vayan mal, que soy de las que lo perdonan y aguantan todo (o casi todo). Pero creo que hasta aquí he podido llegar, me marcho, pero sobre todo con la cabeza alta, por haber aguantando lo que ni siquiera otra persona hubiese podido soportar. Y ya no es un querer o no querer a la otra persona, siempre te he dicho que nunca olvidamos a nadie si no que de pronto las cosas cambian, y supongo que en su día es lo que me tocó a mi, pero yo te dije que te querría siempre, y cuando digo siempre es siempre, por muchas prometas rotas que hayamos hecho ya. Después de todo el dolor es lo que menos me importa, hay cosas que por mucho que duelan consigues sobrevivir con ellas, me importa que no tengamos un termino medio entre los dos y si no puede ser, no puede ser. Antes de que llenaras mi vida de sonrisas tenía una vida y después de ti también sigue existiendo. ¿Sabes? Todavía somos unos niños, no te tengo nada en cuenta, es más, me alegro de que te cruzaras en mi vida aquel día de marzo, y míranos, después de tantas sonrisas y algún que otro sueño incumplido…
¿Miento cuando digo que entre tu y yo solo existe el ‘todo o nada’? Así qué perdóname, perdóname porque un día olvidara como hacerte feliz, supongo que ni siquiera llegué a volver a intentarlo y debí de tirarla toalla demasiado pronto (como siempre). Las cosas acaban, nos gusten o no. Y entre tu y yo no queda ya nada que ofrecernos, al menos por mi parte (pero se que de la tuya mucho menos). Quiero mirarte a los ojos y no ver a un desconocido que un día me dijo te quiero, quiero dejar de mirarte y preguntarme porque narices hemos cambiado, es más, quiero mirarte y no conocerte. Si elijo nada, es nada y eso significa no conocernos, tal vez por eso deba marcharme.
Por último solo debo decirte que después de todo (por mucho que me marche) seguiré ahí, hay ciertas cosas por mucho que queramos no van a cambiar, ni siquiera nuestro odio cambiara eso que debimos de sentir en su momento los dos."


     Me despido con todo el odio con amor que pueda existir hacia ti.








PD: Que no se te olvide, sigo sin saber mentir...

No hay comentarios:

Publicar un comentario